No creo preciso hablar de lo que a través de la mirada puedo mostrar
es la lucha interior de quien ama más allá de lo concebido.
Es sentir cada día esa gota de rocío en las manos,
tratando de que ella no se diluya entre los dedos,
En este mundo que descubro cada día, dónde el gentilicio nace
en el palpitar de cada razón observada y sentida
entre la brisa que siento en la piel,
levitando en los sueños del tiempo detenido,
es no comprender la razón abrazando el corazón
No preciso decir lo que a gritos voy evocando en cada pensamiento
pues siento la vaciedad y extraño el aire que ambos respiramos
los sueños que en un instante se fueron desvaneciendo.
Noches de ausentes que buscan su espacio haciéndose presentes
frío que va mitigando abriendo caminos al verdor de primavera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario